Julio
10 de 2012
Incluso
esa angustia, esa tristeza, esa desesperación que vives, puedes encontrar el
camino para reencontrarte con tú escencia, con el potencial que te habita, porque
si entristeces y desesperas no es por resistirte a la experiencia del mundo de
las ideas que vives, porque no hay
porque resistirse a una experiencia que has creado, te resistes y entristeces
porque eres amor y toda sensación ó experiencia distinta al amor generoso e
infinito te es incómoda, no te es natural.
Sufres
porque estas tratando de imponer el miedo a lo que es amor, porque desde el
amor eliges esa sensación de desasosiego, angustia, dolor, desesperación y eso
no le es natural a tú ser, a tú escencia de amor que te une con el universo y
todos tus hermanos.
No
te juzgues, detente, observa esa tristeza, no luches contra ella, permítete
sentirla plenamente, no la amarres, no la amordaces, date la oportunidad de
dejarla salir en toda su plenitud, para que puedas observarla, sin culpas, ni
juicios, sin tratar de asociarla con el mundo de las ideas, obsérvala como si
no te perteneciera, como lo que es, una emoción distinta a lo que realmente
eres, obsérvala de cerca, no le temas, no le puedes temer a nada porque tú
esencia es el amor.
Y en
el momento que no juzgas esa emoción, que te permites sentirla, que te permites
observarla en toda su dimensión, sin asociarla con ninguna idea ó juicio, en
ese momento vas sintiendo como desaparece, como deja de nublar tú manera de ver
el mundo y te permite el retorno a la tranquilidad, a la paz, desde la cual
puedes experimentar el aquí y el ahora y elegir de nuevo, claramente desde tú
verdadera escencia: el amor.
No
has perdido nada, porque eres parte de lo infinito y mientras seas consciente
de ello sabrás que tú naturaleza es la abundancia, la plenitud y el amor.
Eres
libre, libre, plenamente libre porque el amor, la naturaleza del amor es
libertad infinita, por ello eres libre de creer y crear lo que elijas instante
a instante.
Sí
una elección no se materializa es porque realmente no crees en ella, porque no
la estas creando desde tú escencia sino desde el mundo de las ideas, es como
crear creaciones desde las mismas creaciones.
¿Qué
como es eso?, simple, deseas algo e inmediatamente llenas ese deseo, ó
acompañas ese deseo de miles de ideas, dices quiero esto, pero será el año que
viene porque para eso debo trabajar, sufrir este poco, abstenerme de aquello y de
pronto no se puede porque puede pasar esto y seguro sucede aquello y así, le
pones tantas ideas encima, dispersas tú energía en tantas ideas, empleas tú
potencial en tantas ideas que terminas anulando, desvaneciendo tú deseo
original.
Lo
sé, sé que se te presenta complicado no saturar de ideas cada pensamiento,
porque te has identificado con el mundo de las ideas, pero estas en la búsqueda
y en ese proceso, tarde ó temprano te reencontrarás con tú escencia, con la
fuerza de tú energía, tú potencial infinito y retornarás al estado original, al
que tiene consciencia de su poder creador por encima de las ideas, ese desde el
que los juicios no existen y las sensaciones, las ideas, las palabras, se
asumen como lo que son: creaciones.
Continúa,
no desfallezcas, dale la oportunidad a tú ser de compensarte el esfuerzo que
haces al reencontrarte con la escencia, dale la oportunidad de reflorecer a ese
canal despejado que te conecta con el universo y con todos tus hermanos, date
la oportunidad de limpiar el camino de juicios e ideas, abre el espacio para
despojarte de las creaciones que te han hecho sentirte como un ser limitado,
víctima de las circunstancias, lejos de lo que realmente eres: un ser infinito
que crea cada experiencia libremente, que cuenta con la abundancia y el amor
total para hacerlo, desde y para lo que le es natural: el amor universal.
No rechaces,
no te arrepientas, no juzgues, porque cuando lo haces, juzgas, rechazas y huyes
de creaciones que nacieron del amor, así sea para hacerte experimentar ese
desasosiego y esa decepción que ahora te gobierna. El mundo de las ideas aunque
no es el origen, si no el resultado de tus elecciones, te ha dado gratas y
variadas experiencias, gracias al mundo de las ideas has vivido muchas de las
sensaciones que te han hecho feliz, gracias al mundo de las ideas manejan las
palabras que te permiten tener contacto conmigo e incluso compartirlo con tus
hermanos.
Las
elecciones son individuales y cada uno tiene la libertad y el potencial
infinito para elegir cada una de sus experiencias, la culpa no existe, esa
también es una creación de los seres, una experiencia que han elegido vivir, no
existe culpa en el mundo, en el territorio del amor y eso es lo que eres tú y
todos tus hermanos: amor.
¿Mensajes?,
todo en la vida, en el universo es un mensaje, el amor, el universo, el
potencial que te hace parte del universo infinito a ti y a todos tus hermanos,
se manifiesta todo el tiempo en todo, porque todo tiene origen en él, tú has
elegido que se manifieste mediante esto que escribes y otros hermanos elegirán que
se manifieste cuando lean estas palabras, pero así muchos otros me escucharan
en una canción, me verán en la caída de una hoja del árbol, realmente se trata
de la forma como eligen reflejar, exteriorizar su escencia es todo, no hay
formulas, ni rituales, todas las elecciones son válidas.
Obsérvate,
observa como tú has elegido este proceso de escribir para emprender el camino
de reconectarte con tú escencia, con el uno universal, mira como poco a poco tú
ser ha ido dejando atrás la angustia y no por una simple distracción de
escribir, sino porque en cada palabra te
permites establecer un nuevo lazo con lo que eres en escencia, con tú poder creativo,
con ese maravilloso y infinita capacidad de exteriorizar tú escencia real en
cada creación: el amor.
Confía,
cree, ten fe, sin endosarle ideas, ni imponerle ideas ni herramientas a tú
energía esencial, el poder infinito que te habita no necesita si no de tú
elección sin juicios para crear, el resto son creaciones, ideas e imposiciones
que te has inventado a partir de lo mucho que llevan tú y tus hermanos
identificados con el mundo de las ideas.
Desde
el amor, por el amor y para el amor.
TÚ
AMIGO COMÚN.
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